Durante su trabajo en Paraguay, el consultor técnico destacó la fortaleza del Senacsa y el esfuerzo que está realizando para profesionalizar la cadena de la carne. Además, aseguró que hay una clara intención del productor de mejorar la producción, y resaltó la madurez y el alto nivel técnico de la industria frigorífica. “Estoy gratamente sorprendido con lo que vi”, indicó.

Robaina comentó a Valor Agro que el sector primario y el industrial se mostraron abiertos a avanzar con la regalmentación del dressing, una instrumentación que “permite un lenguaje común entre las partes que intercambian el ganado y se paga a nivel de la canal”.

Y agregó: “Que los dos tengan claro qué se está pagando en la transacción comercial, mejora el relacionamiento entre los productores y las industrias, y aporta a la transparencia del negocio”.

Por otro lado, consideró que la integración tipificación y dressing va a permitir estandarizar las canales y obtener información que entregará valor a la cadena. “La industria puede retroalimentar a la producción indicando, por ejemplo, cuál es el tipo de canal que precisan para cada negocio. Es información que mejorará la ganadería a futuro”, apuntó.

Explicó que la reglamentación del dressing se trata de una serie de operaciones que se realizan en las medias reses que marcan cuáles las estructuras que se pueden retirar de un listado de productos, por ejemplo los porcentajes de grasa.

Al mismo tiempo, aseguró que para aplicar la tipificación, que se decretó la obligatoriedad recientemente, es clave que las canales estén estandarizadas y que no sean afectadas en perfiles y morfologías. “Es vital que el dressing esté reglamentado”.