“Plato Fumigado”: el ranking de los alimentos más contaminados con agroquímicos
En el marco de un estudio reciente sobre la inocuidad alimentaria en Argentina, la Fundación Cauce y Naturaleza de Derechos presentó el informe “Plato Fumigado”. Este trabajo revela preocupantes niveles de contaminación en vegetales. Esta iniciativa esta basada en datos del Senasa y revela la presencia de agroquímicos en frutas y verduras. El informe pone de manifiesto una problemática de salud pública que requiere atención urgente.
Ranking de los Vegetales Más Contaminados
El informe clasifica los vegetales según la cantidad de agroquímicos detectados, destacando las frutas y verduras más afectadas. A continuación, se presenta el ranking de los alimentos con mayor presencia de residuos tóxicos:
- Pera: 34 agroquímicos detectados
- Manzana: 31 agroquímicos
- Naranja: 30 agroquímicos
- Banana: 30 agroquímicos
- Tomate: 29 agroquímicos
- Uva: 27 agroquímicos
- Palta: 26 agroquímicos
- Mandarina: 25 agroquímicos
- Limón: 24 agroquímicos
- Pimiento: 23 agroquímicos
Estos datos provienen del Plan Nacional de Control de Residuos e Higiene en Alimentos (Creha), que examinó 54 tipos de alimentos vegetales. El informe destaca que los hallazgos son consistentes con la tendencia de producción intensiva que prioriza el rendimiento sobre la salud del consumidor.
Diversidad de Agroquímicos Encontrados
El estudio identificó un total de 83 principios activos en los vegetales, entre los que se encuentran herbicidas, insecticidas y fungicidas. Entre los más preocupantes figuran:
- Glifosato: El herbicida más utilizado, presente en 423 fórmulas comerciales.
- 2,4-D: Herbicida vinculado a diversos problemas de salud.
- Acetamiprid: Insecticida que afecta el sistema nervioso.
- Benomil: Fungicida considerado peligroso.
Más de la mitad de estos principios activos están prohibidos en la Unión Europea, y un número significativo está clasificado como cancerígeno.
Impactos en la Salud
La exposición a estos agroquímicos ha sido vinculada a diversos problemas de salud. En mujeres, se han asociado con cáncer de mama, ovario y útero, así como con malformaciones y trastornos reproductivos. En hombres, se han observado vínculos con cáncer de próstata, testículo y disminución de la fertilidad.
El informe subraya que los riesgos para la salud son especialmente alarmantes debido a la alta concentración de estos químicos en alimentos básicos que deberían ser nutritivos y seguros. La situación se agrava con la contaminación del agua, que también presenta altos niveles de agroquímicos.
Los especialistas que confeccionaron el informe –Glenda Mangia y Fernando Cabaleiro– consideran que a partir del hallazgo de ese nivel de agroquímicos resulta “urgente” la prohibición de los que ya están restringidos por la Unión Europea, como también al menos una revisión de la legalidad de aquellos considerados peligrosos, un 34% de los hallados.
Recomendaciones y Medidas Propuestas
La Fundación Cauce y Naturaleza de Derechos recomiendan:
- Prohibición de Agroquímicos Peligrosos: Especialmente aquellos ya restringidos en la Unión Europea.
- Revisión de la Legislación: Evaluar la legalidad de principios activos considerados peligrosos.
- Fomento de la Agroecología: Apoyar la producción agroecológica como alternativa sostenible y menos contaminante.
Además, enfatizan la necesidad de una supervisión más rigurosa y de políticas públicas que prioricen la salud pública sobre los intereses de la agroindustria.
Contexto en América Latina: La Problemática de la Contaminación Agroquímica
Brasil: En Brasil, el uso de agroquímicos está en auge, impulsado por la expansión de la agricultura intensiva. Según un estudio de la Universidad Federal de Goiás, se encontraron residuos de agroquímicos en el 80% de las frutas y verduras analizadas. El caso del glifosato es especialmente preocupante: Brasil es uno de los mayores consumidores de este herbicida en el mundo, a pesar de las crecientes evidencias sobre sus efectos nocivos para la salud y el medio ambiente.
Chile: En Chile, la presencia de agroquímicos en alimentos también es alarmante. La Universidad de Santiago de Chile reportó que más del 50% de las muestras de frutas y verduras contenían residuos de pesticidas, algunos de los cuales están prohibidos en la Unión Europea. En particular, se ha encontrado glifosato y clorpirifós en niveles que superan los límites recomendados por organismos internacionales.
Colombia: En Colombia, la situación es igualmente grave. Investigaciones de la Fundación Natura revelaron que el 60% de las muestras de productos agrícolas contenían residuos de agroquímicos. El país ha enfrentado controversias sobre el uso de glifosato en la erradicación de cultivos ilícitos, lo que ha llevado a una alta exposición de estos químicos en las áreas agrícolas y las comunidades cercanas.
Perú: En Perú, un estudio realizado por el Instituto de Investigación de la Amazonía Peruana (IIAP) encontró que el 70% de las muestras de frutas y verduras de mercados locales contenían residuos de pesticidas. El informe destacó que muchos de estos productos son de uso restringido o prohibido en otros países debido a sus efectos potencialmente nocivos.
Paraguay: En Paraguay, el impacto de la agricultura intensiva en la salud pública es evidente. Un estudio de la Universidad Nacional de Asunción reportó altos niveles de pesticidas en alimentos básicos como maíz y soja. La situación se agrava por la falta de regulaciones estrictas y el uso extensivo de agroquímicos en la agricultura.
Por último el informe “Plato Fumigado” pone de relieve una crisis de salud pública alimentaria en Argentina, que refleja una problemática común en América Latina. La alta contaminación de vegetales con agroquímicos plantea serios riesgos para la salud de los consumidores y exige una acción inmediata para proteger el derecho a una alimentación segura y saludable. La transición hacia prácticas agroecológicas y una legislación más estricta sobre agroquímicos son pasos cruciales para abordar esta problemática de manera efectiva en toda la región.
Con información de La Política Ambiental