Caen policías y técnico de Senacsa en megaesquema de abigeato
Tras el robo de unos 300 animales vacunos de la estancia Santa Ana, de la localidad de Cadete Pastor Pando, del Departamento de Presidente Hayes, se activó la operación Sequimur Vestigia, cuya intervención se extendió además a los departamentos de Central, Paraguarí, Concepción, Cordillera y Misiones.
El hecho ocurrió entre el 6 y 8 de octubre; desde entonces, fueron capturadas 11 personas, cuatro de ellas suboficiales de la Policía Nacional, un técnico del Senacsa, un empleado de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), el encargado de una estancia, un chofer de camión, un capataz y dos pobladores que participaron del hecho.
Asimismo, hay otras siete personas involucradas con orden de detención.
El comisario Wilson Cáceres, jefe del Departamento de Lucha contra el Abigeato, explicó que los efectivos policiales prestaban servicio en su unidad, uno de ellos era propietario de un trasganado y los demás estaban asignados a un puesto de control que justamente debía verificar el paso de animales.
La Policía Nacional identificó a los detenidos, pero no especificó la participación de cada uno. Estos son: Ricardo Coronel Guerrero, Marcial Martínez, Ricardo Zarza Paredes, Teodoro Locatti, Carlos Darío Alvarenga, Jorge Daniel Morínigo, Fernán Valenzuela, Angel Woistschach, Mariano González, Carlos Zarza Martínez y Gilberto Dávalos Zárate.
Ante la falta de resultados en la lucha contra el abigeato en la zona, las sospechas apuntaban a aque los uniformados dejaban pasar los trasganados con animales robados y por este motivo fueron trasladados a otras dependencias, hasta que en el transcurso de la investigación se produjeron las detenciones.
En los siete allanamientos, ejecutados principalmente en establecimientos ganaderos, se incautaron 133 animales vacunos que fueron depositados en carácter de guarda para verificar la legalidad de la tenencia, solo 45 correspondían a la estancia Santa Ana. Así también se decomisaron tres tractocamiones utilizados para el traslado de los bovinos y una camioneta.
Las evidencias consisten, además, en dinero en efectivo, armas de fuego, aparatos celulares y documentaciones.