La situación del Frigorífico Casablanca se agravó esta semana con los primeros cheques para pagar el ganado destinado a la faena dado que varios de ellos rebotaron.

La empresa alude a las dificultades que surgieron tras la quiebra de Conexión Ganadera, empresa que tiene un pasivo de aproximadamente 250 millones de dólares, y cuyo director, Pablo Carrasco, fue denunciado por los inversores afectados por presunta estafa y apropiación indebida.

Varios escritorios rurales y productores ganaderos del norte del país fueron afectados por la falta de pagos y se estima que las deudas acumulan cientos de miles de dólares, informó el periodista Eduardo Preve, que tiene su columna La Tapadita en Nada que perder todos los martes a partir de las 9.30 horas.

En febrero, el frigorífico redujo su faena de 1.200 animales a 400 cabezas, informó el presidente del sindicato, Nicolás Laenen, a Nada que perder. La plantilla disminuyó de 531 empleados a poco más de 100 empleados, agregó el dirigente sindical.