Hasta noviembre de 2024, más de 30 especies de mamíferos han sido infectadas por este virus, incluyendo ganado vacuno en los Estados Unidos. Esta nueva situación ha encendido las alarmas globales debido a su capacidad de adaptarse y cruzar barreras de especies, afectando no solo a la fauna y animales domésticos, sino también poniendo en riesgo la salud pública.

La situación en el ganado vacuno lechero de Estados Unidos

En los Estados Unidos, se han detectado casos de gripe aviar altamente patógena en el ganado lechero, lo que ha generado una preocupación considerable en la comunidad internacional. Aunque los bovinos infectados suelen ser asintomáticos o presentan una enfermedad leve, los signos clínicos observados incluyen:

• Disminución en la producción de leche.
• Espesor anormal de la leche, similar al calostro.
• Pérdida de apetito y letargo.
• Fiebre y deshidratación.

La circulación intensiva del virus H5N1 en estos animales plantea un riesgo significativo de que el virus se adapte mejor a los mamíferos, lo que podría facilitar su transmisión a otros animales de granja y, potencialmente, a los seres humanos.

Riesgos asociados y transmisión horizontal

Las investigaciones más recientes han identificado la leche cruda de vacas infectadas como un material de alto riesgo. Existen pruebas de que el virus puede transmitirse horizontalmente de vacas lactantes infectadas a:

• Otros bovinos.
• Aves de corral.
• Gatos y otros mamíferos domésticos.

Por este motivo, se enfatiza que únicamente debe comercializarse leche de vacas no infectadas que haya sido pasteurizada o sometida a procesos similares de inactivación del virus. Esta precaución es esencial para evitar la propagación del virus a través de la cadena alimentaria.

Vigilancia y medidas preventivas internacionales

La Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) ha solicitado a sus 183 países miembros un enfoque integral para mitigar los riesgos de la IAAP. Entre las principales recomendaciones se encuentran:

1. Incrementar la vigilancia en aves silvestres y domésticas, así como en ganado vacuno.
2. Incluir la IAAP como diagnóstico diferencial en especies no aviares, especialmente en animales con signos clínicos compatibles con la enfermedad.
3. Notificar casos sospechosos de gripe aviar en ganado vacuno y compartir las secuencias genéticas del virus en bases de datos públicas.
4. Aplicar medidas de bioseguridad estrictas, como la restricción de movimientos en explotaciones ganaderas infectadas y el uso de equipos de protección personal por parte del personal que manipula ganado.

Estas medidas buscan evitar la transmisión del virus entre diferentes especies y reducir el impacto en la producción ganadera y la salud pública.

Impacto económico y comercial

La detección de IAAP en ganado vacuno también plantea desafíos económicos. Según la FAO, la comercialización de productos lácteos de vacas infectadas o expuestas está estrictamente prohibida para evitar riesgos sanitarios. Las restricciones comerciales injustificadas pueden tener un impacto significativo en:

• Exportaciones de ganado y productos derivados.
• Industria láctea, especialmente en países con casos reportados.
• Economías rurales que dependen del comercio ganadero.

La OMSA enfatiza que las restricciones deben basarse en análisis de riesgo científicos, siguiendo las normativas del Código Sanitario para Animales Terrestres.

Salud pública y evaluación del riesgo humano

Aunque el riesgo para los seres humanos se considera bajo en general, puede ser moderado para personas que estén en contacto directo con animales infectados o con entornos contaminados. Las principales recomendaciones incluyen:

• Uso de equipos de protección personal al manipular ganado.
• Evitar visitas a otras explotaciones tras la exposición a animales infectados.
• Adoptar medidas estándar de seguridad alimentaria, como la correcta cocción y manipulación de productos animales.

La colaboración entre la OMSA, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) es esencial para evaluar los riesgos y garantizar la transparencia en la comunicación de los mismos.

Avances en la investigación y perspectivas futuras

La comunidad científica trabaja activamente para comprender mejor la patogénesis del virus H5N1 y sus vías de transmisión entre diferentes especies. Actualmente, no se ha identificado ninguna adaptación específica del virus al ser humano, pero su capacidad de mutación y adaptación sigue siendo un motivo de preocupación.

Se están llevando a cabo estudios para analizar:

• La transmisión del virus entre ganado vacuno y otras especies.
• Las posibles mutaciones genéticas que faciliten la transmisión entre mamíferos.
• Nuevas estrategias de prevención para proteger tanto al ganado como a las poblaciones humanas.

Conclusión: Una respuesta global urgente

La propagación de la gripe aviar altamente patógena (IAAP) en mamíferos, especialmente en ganado vacuno, subraya la necesidad de una cooperación internacional para prevenir y controlar esta amenaza. Las medidas de vigilancia, bioseguridad y notificación transparente son esenciales para contener el virus y proteger tanto la salud animal como la pública. Asimismo, es fundamental evitar la desinformación y garantizar que las restricciones comerciales estén respaldadas por análisis científicos.

El seguimiento continuo y la aplicación de medidas preventivas pueden mitigar los riesgos y limitar el impacto económico y sanitario de este desafío global.