Por Jim Wyckoff

A lo largo del año, los valores de exportación de leche en polvo descremada (NDM), queso y suero se mantuvieron mediocres, principalmente debido al debilitamiento de la demanda en China y el Sudeste Asiático. A nivel mundial, las tasas de interés más altas impactaron el gasto discrecional, afectando particularmente el consumo de lácteos, que no es un alimento básico tradicional de las dietas asiáticas, la región de mayor crecimiento para los principales exportadores.

En 2024, se espera que las exportaciones estadounidenses enfrenten obstáculos similares durante gran parte del año. Una combinación de factores ha impactado la demanda en mercados clave de Asia en 2023 y se espera que continúe en 2024. En 2023, después del fin de los bloqueos por COVID, los gobiernos se vieron presionados para controlar el gasto fiscal y moderar la demanda agregada para combatir el alto nivel de inflación.

Los bancos centrales han elevado las tasas de interés para aumentar el costo del crédito, lo que ha provocado una desaceleración de la inversión empresarial privada para las exportaciones manufactureras en mercados como Filipinas y Tailandia. La consiguiente desaceleración del producto interno bruto (PIB) y del crecimiento del ingreso ha tenido efectos indirectos sobre el gasto discrecional.

Los consumidores también han estado lidiando con una alta inflación de los alimentos, una depreciación sustancial de la moneda frente al dólar estadounidense también ha contribuido al aumento de los precios de los alimentos importados y un alto nivel de energía, todo lo cual ha hecho mella en el poder adquisitivo de los consumidores.

En China, el mayor mercado de importación de productos lácteos, el excedente de producción de leche cruda dio lugar a subsidios gubernamentales para estabilizar el sector procesador interno y resultó en una reducción de la demanda de importaciones de leche entera en polvo (principalmente de Nueva Zelanda) y NDM de los EUA. Como China no produce cantidades significativas de productos de mayor valor como queso o mantequilla, los procesadores de lácteos compran el excedente de leche cruda y la convierten en leche en polvo para su almacenamiento de acuerdo con el “Contrato de compra y venta de leche fresca”.

Se espera que las disminuciones previstas en la producción porcina de China conduzcan a un menor uso de piensos y, por tanto, de suero. Los grandes inventarios de leche desnatada y entera en polvo seguirán limitando también las oportunidades de exportación para Estados Unidos.

Se espera que las caídas interanuales de precios de varios productos lácteos estadounidenses persistan a principios de 2024, lo que presionará los valores de las exportaciones. Sin embargo, se prevé una mayor demanda de productos desnatados en la segunda mitad del año a medida que mejore la competitividad de los precios en Estados Unidos. Se pronostica que la NDM y el suero, fundamentales para las exportaciones, registrarán precios más bajos año tras año en la primera mitad de 2024, y se espera que los volúmenes sean débiles debido a la débil demanda del este y sudeste de Asia.

Los proyectos actuales de WASDE promedian los precios de NDM en $1,17 por libra en el año fiscal 2024, un 8 por ciento menos que los niveles del año fiscal 2023. Se espera que esta disminución sea más pronunciada en la primera mitad del año fiscal 2024. Se pronostica que los precios del queso promedien 1,71 dólares por libra, un 8 por ciento menos que en el año fiscal 2023. Las expectativas de un crecimiento solo moderado en los volúmenes de envíos y precios más bajos esperados para los productos lácteos durante gran parte del año indican que se pronostica que los valores totales de las exportaciones de lácteos se contraerán en el año fiscal 2024, con mayor intensidad en los primeros dos trimestres.

Se prevé también que el año fiscal 2024 se parezca a gran parte de los datos mensuales del año fiscal 2023, en el sentido de que las señales de crecimiento en algunas categorías se ven invariablemente superadas por caídas en otras. Se prevé que los aumentos en el valor de las exportaciones de queso y fórmulas para lactantes se verán más que compensados por las disminuciones de la leche desnatada en polvo, el suero, la lactosa y la mantequilla.

En la Unión Europea se prevé una disminución marginal de la producción de leche, con una disminución de 200.000 toneladas, lo que eleva el total a 144,6 millones. Una modesta mejora en la productividad de las vacas es insuficiente para contrarrestar reducciones adicionales en el rebaño lechero. Las caídas persistentes en los precios de la leche al productor, junto con costos de producción consistentemente altos, continúan ejerciendo presión sobre los productores de leche, particularmente en los principales estados miembros productores como Alemania, Francia, España y Polonia.

El impacto es más pronunciado entre las granjas más pequeñas que carecen de la capacidad de capitalizar eficiencias de escala o poder de negociación organizado con los procesadores para impulsar la competencia por partes del pool de leche. En particular, los productores también están luchando por cumplir con las regulaciones ambientales. Iniciativas como el límite de emisiones de nitrógeno del gobierno holandés y el plan de pago voluntario propuesto por el gobierno irlandés para incentivar el sacrificio de vacas lecheras añaden mayor complejidad.

Se espera que estos factores conduzcan a una mayor consolidación del mercado y cierres entre los productores más pequeños. Sin embargo, se prevé que los operadores más grandes mantengan los rebaños sin disminuir, lo que desacelerará el ritmo de reducción de rebaños en 2024.

Del equipo de redacción de ElSitioPorcino