Durante los meses de noviembre y diciembre de 2024, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) llevó a cabo un aumento significativo en los controles de vehículos que transportan animales vivos y productos alimenticios. La fiscalización creció un 170% respecto al período anterior, alcanzando un total de 3.748 vehículos inspeccionados en rutas de todo el país. Esta medida es parte de un plan integral que busca mejorar los controles en aras de proteger tanto la salud de los consumidores como los estatus zoofitosanitarios del país.

Los operativos fueron planificados en función del análisis de información proveniente de los sistemas del Senasa, con el objetivo de identificar y reducir los posibles riesgos sanitarios asociados al transporte de productos alimenticios y animales. Durante las inspecciones, se detectaron diversas irregularidades, entre las que se destacan la falta de habilitación en los transportes, la ausencia de documentos de tránsito electrónico para productos de origen animal y vegetal, y la falta de equipos adecuados para el traslado de alimentos perecederos, como el frío en camiones.

En caso de detectar infracciones, los inspectores del Senasa confeccionan actas y, en situaciones graves, proceden al decomiso de la mercadería involucrada, que puede ser destruida. En el marco de estos operativos, se llevaron a cabo 74 decomisos de productos que no cumplían con las normativas vigentes. La implementación de estas medidas es clave para evitar la circulación de productos de riesgo que puedan comprometer la salud de los consumidores.

Además de los controles en las rutas, el plan de fiscalización cuenta con la colaboración de fuerzas de seguridad nacionales, provinciales y municipales. Los operativos son realizados en puntos estratégicos de las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, abarcando una variedad de vehículos, desde camiones hasta utilitarios y furgones.

Fuente: Argentina.gob.ar